El 7 de agosto de 1956 El Tiempo cumplía un año desde que había detenido sus rotativas debido a la persecución de Rojas Pinilla a la familia Santos, los dueños del medio. Entre tanto, el periódico que lo había reemplazado, El Intermedio, sufría constantes acosos de los Censores —funcionarios que vigilaban y modificaban el contenido en la prensa—. El Relator del 8 de agosto de 1956 publicó la carta de censura que le había enviado el Gobernador Alberto Gómez Arenas.
Nils Bongue cuestiona el uso del término dictadura por parte de algunos historiados cuando se refieren al mando de Rojas Pinilla.
«A Pinilla lo respaldaba todo el mundo y por eso era un gobernante legítimo. El ambiente político de Colombia de esa época se puede explicar con una frase que me dijeron unos venezolanos que venían conmigo en el barco Marco Polo hacia Colombia: ‘los colombianos se dividen en conservadores y liberales que se diferencian, básicamente, en que los conservadores van a misa de seis y los liberales a la de nueve’».